En una de las esquinas más elegantes de Manhattan se encuentra The Mark, un hotel que redefinió el lujo neoyorquino con una mezcla precisa de diseño, carácter cultural y servicio excepcional. Su propuesta, dirigida por el diseñador francés Jacques Grange, combina arte contemporáneo, arquitectura clásica y un enfoque cosmopolita que se siente tan sofisticado como relajado.
The Mark es uno de esos hoteles donde cada espacio —desde el lobby en blanco y negro hasta las suites con líneas geométricas— revela una estética que equilibra glamour con funcionalidad.
Una identidad visual que no se parece a ninguna otra
La firma de Jacques Grange está en todas partes: suelos gráficos, mobiliario hecho a medida, piezas artísticas seleccionadas y un estilo que abraza el Art Deco sin caer en nostalgia. Los interiores son amplios, luminosos y llenos de personalidad.
La combinación de geometría audaz con tonos cálidos crea una atmósfera que se siente a la vez clásica, divertida y profundamente neoyorquina.
Habitaciones diseñadas como residencias de lujo
Las habitaciones y suites del hotel destacan por su confort discreto y su elegancia arquitectónica. Materiales nobles, baños de mármol, vestidores generosos y ventanales que se abren a las calles del Upper East Side definen la experiencia.
Las suites más exclusivas —incluida una de las penthouses más grandes de Estados Unidos— ofrecen terrazas panorámicas, comedores privados, bibliotecas y espacios que evocan el estilo de las grandes residencias de Manhattan.
Gastronomía de Jean-Georges
La cocina del hotel está liderada por el renombrado chef Jean-Georges Vongerichten. Su restaurante combina técnica francesa con ingredientes locales y una carta diseñada para cualquier momento del día.
El Mark Bar, con iluminación tenue y un ambiente íntimo, es uno de los preferidos para cocteles en el Upper East Side. El servicio de in-room dining es considerado uno de los mejores de la ciudad, llevando la experiencia gastronómica al nivel exacto de su clientela.
Servicios exclusivos que elevan la estancia
The Mark ofrece una colección de servicios que lo distinguen del resto de Manhattan: bicicletas personalizadas, un carrito de hot dogs gourmet, privilegios de compras y acceso a experiencias culturales únicas.
La ubicación, a pocos pasos de Central Park, convierte al hotel en un punto ideal para recorrer museos, boutiques y avenidas históricas.
Un hotel para quienes buscan estilo y cultura
El perfil de huéspedes es tan variado como selecto: artistas, diseñadores, viajeros de negocios, familias y celebridades encuentran aquí una mezcla perfecta de discreción, estética y comodidad.
The Mark no solo es un hotel, sino una declaración de estilo que refleja lo mejor del Upper East Side contemporáneo.
