En el corazón de Santa Lucía, rodeado por las colinas tropicales de Soufrière y con una vista privilegiada hacia los majestuosos Pitons —montañas declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO—, se encuentra Jade Mountain, uno de los resorts más exclusivos del Caribe y un destino que redefine el lujo, la arquitectura y la conexión con la naturaleza.
Este hotel de lujo, diseñado por el arquitecto Nick Troubetzkoy, es famoso por su propuesta arquitectónica audaz: suites sin cuarta pared, techos elevados y piscinas privadas que se funden visualmente con el mar Caribe. Cada espacio, llamado “sanctuary” en lugar de “suite”, está diseñado para ofrecer una experiencia sensorial sin interrupciones, donde el paisaje se convierte en parte integral de la estancia.
La privacidad es absoluta. Jade Mountain está pensado para viajeros que valoran la exclusividad y buscan una desconexión total. No hay televisores ni teléfonos en las habitaciones, pero sí una vista infinita, servicio personalizado y un ambiente de serenidad incomparable. La mayoría de sus sanctuaries cuentan con piscinas de borde infinito y mosaicos personalizados que reflejan la luz del entorno, creando un efecto hipnótico.
El resort también destaca por su enfoque gastronómico de alta gama. Su restaurante, Jade Mountain Club, está dirigido por chefs galardonados que trabajan con ingredientes locales y técnicas contemporáneas para crear platos que celebran los sabores caribeños. Todo esto acompañado por una de las mejores selecciones de vinos de la región.
Además, los huéspedes tienen acceso a las instalaciones de su propiedad hermana, Anse Chastanet, donde pueden disfrutar de actividades como buceo, snorkeling, caminatas guiadas por la selva y clases de yoga al aire libre.
Jade Mountain no es solo un resort; es un destino en sí mismo. Ideal para lunas de miel, escapadas románticas o viajes de reconexión personal, ofrece una experiencia inmersiva en uno de los paisajes más impactantes del Caribe.
Si buscas hospedarte en un lugar que fusiona diseño, naturaleza y tranquilidad absoluta, Jade Mountain en Santa Lucía debe estar en lo más alto de tu lista.