A los pies del Popocatépetl se encuentra Cholula, una de las ciudades vivas más antiguas del continente. Su historia se extiende por miles de años, desde los centros ceremoniales prehispánicos hasta las tradiciones virreinales y una vida universitaria que le da dinamismo actual.
Es un destino donde el pasado y el presente dialogan en cada esquina, creando una experiencia rica en cultura, arquitectura y vida cotidiana.
La Gran Pirámide: Un símbolo que domina el paisaje
El rasgo más reconocible de Cholula es su Gran Pirámide, considerada una de las más grandes del mundo por volumen. Gran parte permanece oculta bajo una colina natural, sobre la cual se levanta el Santuario de la Virgen de los Remedios.
El contraste entre el templo colonial y la estructura prehispánica revela la complejidad histórica de la región. Desde su cima, las vistas del valle y del Popocatépetl son uno de los panoramas más inolvidables de Puebla.
Una ciudad de templos y tradiciones
Cholula destaca por su impresionante concentración de iglesias y capillas, resultado de su importancia durante el periodo virreinal.
Templos como San Gabriel, San Francisco Acatepec y Santa María Tonantzintla muestran una mezcla exquisita de arquitectura barroca, talavera poblana y arte sacro indígena.
Las festividades tradicionales, procesiones y celebraciones patronales dotan a la ciudad de un ritmo ceremonial que persiste a lo largo del año.
Vida joven entre cafés, mercados y plazas
La presencia de universidades cercanas ha transformado la vida diaria de Cholula. Cafeterías, bares, galerías y pequeños proyectos creativos han florecido en sus calles, creando un ambiente relajado y vibrante.
El Zócalo y sus alrededores se han convertido en puntos de encuentro donde lo histórico convive con lo contemporáneo.
La oferta gastronómica combina cocina poblana tradicional —como el mole y las cemitas— con propuestas modernas que atraen a visitantes jóvenes y locales.
Un espacio donde la historia se siente presente
Caminar por Cholula es observar cómo diferentes épocas se superponen sin desvanecerse. La ciudad mantiene tradiciones artesanales, mercados llenos de colores y un sentido de comunidad fuerte.
La cercanía al volcán y al paisaje agrícola del valle añade un elemento natural que forma parte de la identidad del lugar.
Cholula representa una mezcla única: un centro arqueológico monumental, arquitectura religiosa deslumbrante y una energía juvenil que mantiene la ciudad en constante renovación.
