Si planeaste viajar a un lugar con clima frío, no necesariamente nevado, durante el invierno, tienes que tomar previsiones, sobre todo si vives en un sitio templado o caluroso y no quieres que tus vacaciones se tornen en suplicio.
En la planeación es recomendable incluir una visita familiar al médico para que recete a la familia lo necesario para reforzar el sistema inmunológico y dar vitalidad a cada uno, con medicamentos que pueden ser vitamina C y/o tratamientos con Bedoyecta Tri o aceite de hígado de bacalao, una emulsión de mal recuerdo para los adultos que hoy, por fortuna, se consigue de sabores.
Lo siguiente es preparar tu ropa, teniendo en cuenta que vas a vestirte con la técnica de la cebolla, es decir, por capas, para mantener tu cuerpo con una buena protección térmica que evite la pérdida de calor y adaptarte con facilidad al clima en interiores si vas a visitar tiendas, museos o restaurantes.
Es importante protegerse bien antes de exponerse al frío o a la combinación de este con la humedad. En cualquier caso, se debe evitar que el cuerpo pierda calor. Con frío el organismo consume energía extra para recuperar la temperatura y eso
causa fatiga. Por eso, hay que evitarlo, pues una vez que sientes frío es tarde.
Ten en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Lleva ropa térmica que te ayude a mantener el calor. Es conveniente que la tengas puesta cuando subas al avión para que al llegar a tu destino el cambio de temperatura no impacte en el organismo.
- Usa calcetines de lana. Ponerte dos pares no es recomendable porque con frecuencia el efecto es contrario al deseado, debido a que el elástico y la presión del calzado enfriarán los pies por la falta de circulación sanguínea. Además, se reduce la evacuación de la humedad y con los pies húmedos aumenta la sensación de frío.
- Usa camiseta y camisa de algodón y pantalón de pana o de una tela lo suficientemente gruesa. El pantalón vaquero se considera la prenda más inútil que puedas llevar a un destino frío, no sólo porque no abrigan, sino porque dan frío y, si se humedecen, peor.
- Usar suéter es opcional, al igual que la pechera con cuello de tortuga, pero no olvides la chamarra, que preferentemente debe ser impermeable.
- Cubre la cabeza con un gorro y nariz y boca con bufanda. Respirar el aire frío directamente hace que el cuerpo pierda temperatura con rapidez con las consecuencias que ya mencionamos. La bufanda no sólo cubre tu cuello, sino que también es un filtro.
- Usa guantes para evitar que tus manos se enfríen, preferentemente de piel o con un tejido muy cerrado que impida el paso del aire.
- En Invierno como en Verano, protégete del sol. La radiación ultravioleta es igual de perjudicial para la piel. No olvides protección para los labios, la piel y los ojos.
- Por último, si vas a un sitio con hielo y nieve, usa botas impermeables y con suela antiderrapante. Evita que un resbalón acabe con tus vacaciones.
Ten en cuenta que, cuanto más extremo sea el sitio al que te diriges, más extremas deben ser las medidas de precaución con respecto al aislamiento térmico. En tu viaje lo primordial es tu seguridad y la de tu familia.
