Benjamín de la Peña Mora llegó a Cancún hace 40 años, donde ejerció su profesión de abogado, fue servidor público, titular de la Notaría Pública No. 20 y, ya en el semirretiro, se dedicó a dar forma a un proyecto que conjuga sus pasiones: el automovilismo y la promoción.
Es así que, en mayo de 2014, concretó, con apoyo de patrocinadores privados, un evento automovilístico de importancia nacional e internacional, el Rally Maya, que rinde culto al automóvil antiguo, al tiempo que promueve atractivos de la península de Yucatán y el legado de la cultura maya.
De la Peña, CEO y fundador del Rally Maya, vio su gran oportunidad en el Tianguis Turístico de México, que en mayo de 2014 tuvo su 39 edición en Quintana Roo. Su proyecto embonaba a la perfección con esa una importante plataforma de promoción y negocios.
Antes, realizó una intensa promoción para invitar a socios de clubes del automóvil del país y del extranjero a un recorrido de mil 400 kilómetros por Quintana Roo, Campeche y Yucatán, divididos en cinco etapas que se corrieron en seis días, a partir del 7 de mayo de ese año.
El primer derrotero incluyó a la Ruta Puuc, una serie de zonas arqueológicas en el sur de Yucatán y norte de Campeche. Fue tal el éxito, que 60 por ciento de los participantes volvió para las siguientes ediciones.
De la Peña define al Rally Maya como un museo rodante que rinde culto al automóvil –en distintas ediciones el número de vehículos participantes rebasó los 100–, pero al mismo tiempo es un evento altruista que apoya el tratamiento médico de niños con diabetes tipo 1, síndrome de Down, problemas auditivos o que requieran sillas de ruedas. En su más reciente edición, incluso, se entregaron cubetas de pintura en comunidades rurales.
En el Rally participan vehículos de marcas como Porsche, Rolls Royce, Jaguar, Cadillac, Mercedes Benz, el clásico Ford modelo A, Audi y Alfa Romeo, entre otros.
Autos antiguos y cultura
No es, desde luego, una competencia de velocidad, sino un desfile que automóviles con al menos 40 años, que se desarrolla en un marco único que combina naturaleza y cultura. “La gran cantidad de contenidos nos hace más atractivos e interesantes, por eso, cada año cambiamos la ruta”, afirma el CEO del Rally.
Hay cuatro categorías de antigüedad: vehículos de 1915 a 1931; 1932-1949; 1950-1964 y 1965-1975, que han hecho del Rally un evento de importancia nacional e internacional.
Entre los mejores 10
Hoy el Rally está ranqueado entre los 10 mejores del mundo y su promotor confía en que pronto será el primero o segundo, por los atractivos, las condiciones de la red carretera y la seguridad. Los gobiernos estatales brindan hoy importante apoyo logístico y vigilancia.
El evento tiene el respaldo de la FIVA (Federation Internationale Vehicules Anciens), la Federación Mexicana de Automóviles Antiguos y de Colección A.C., la Comisión Nacional Vintage, el Club Mercedes Benz México, la Federación Internacional de Vehículos Ancestros, el Museo del Automóvil del Sureste y el Museo Iconográfico de la Carrera Panamericana.
En el Rally han participado pilotos con vehículos que son verdaderas joyas con ruedas, traídos de Dubái, Suiza, Alemania, España, Inglaterra, Nicaragua, Honduras, Perú, Colombia, Brasil y de 16 estados del país. En 2019 una pareja viajó por tierra desde Argentina sólo para participar.
Este año, la séptima edición, que partirá de Campeche y terminará en Isla Mujeres, debió cambiar de fecha debido a la contingencia sanitaria que afectó a todo el mundo. El arranque, programado para el 16 de mayo, sería ahora el 29 de agosto.
