Fundado hace 25 años, hoy se ubica entre los 10 mejores del país y recibe más de un millón de visitantes cada año
Las personas no pueden enamorarse de lo que no conocen, eso incluye a ciudades, estados y países. En el caso de México, cuya riqueza cultural es tan grande como sus 32 estados y dos mil 500 municipios, hay mucho para quererlo, es más, para amarlo.
Las fiestas patrias no serán lo mismo en este 2020, año de pandemia, de cambios y en el que se está escribiendo, cada día, un giro de trama que nadie esperaba en la historia mundial ni en la nacional. Sin embargo, uno de sus propósitos es exaltar, sobre todo en los más jóvenes, el amor por los Estados Unidos Mexicanos.
No todo está perdido. En Nuevo León, un estado industrial y de vanguardia, específicamente en su capital, Monterrey, hay un sitio donde el pasado sentó sus reales y se exhiben, en más de mil 200 piezas, los diversos momentos de la historia, la cultura y el arte nacional: El Museo de Historia Mexicana.
Fundado hace 25 años, el sitio se ubica entre los 10 mejores museos mexicanos, recibe más de un millón de visitas al año y narra la historia desde la época prehispánica hasta los acontecimientos más recientes.
Érase una vez
Antes, mucho antes de cualquier cosa que conozcamos estaban los pueblos aborígenes, diferentes razas, distintas culturas, otros dioses, enemigos, aliados y nativos del territorio que hoy se conoce como México.
Por medio de videos, las piezas y presentaciones interactivas, el museo muestra cómo fue la vida previa a la llegada de los representantes de la corona española, en 1519.
La evidencia de cómo se vivió la conquista está conformada por piezas escultóricas y pictóricas de la época, armas y objetos religiosos. Hay 133 pinturas realizadas por algunos de los más relevantes pintores novohispanos. Se ha expuesto la Galería de Castas Mexicanas, la cual es considerada como un gran tesoro artístico e histórico y fue donada por la coleccionista Lydia Sada.
Uno de los aspectos más interesantes es la muestra de la mezcla racial en la Nueva España. Se pueden observar los rostros indígenas, blancos, negros y las mezclas que surgieron de su interacción.
Una independencia y un país
Nuestro orgullo nacional se fortalece cada 15 y 16 de septiembre, cuando recordamos el movimiento de independencia que inició Miguel Hidalgo y Costilla, a partir de este momento la historia se va llenando de nombres notables como José María Morelos, Vicente Guerrero, el emperador Maximiliano de Habsburgo, Benito Juárez y Porfirio Díaz, para regalarnos recuerdos de un siglo XIX muy agitado.
En el Siglo XX, el visitante podrá conocer distintos aspectos de la Revolución Mexicana contados por objetos, pinturas y videos, así como a sus hombres y mujeres, quienes fueron pieza clave para su desarrollo.
Para un cierre con broche de oro aparece una enorme locomotora con un vagón en cuyo interior se proyecta un filme que muestra no sólo la importancia de este medio de transporte en la vida social, económica y política de México, sino también en la guerra, como medio de transporte para tropas, pertrechos y suministros durante la Revolución.
Cabe mencionar que la máquina fue integrada en la segunda planta del museo desde su construcción, antes de que se edificaran las paredes, por lo tanto, es la única pieza que nunca podría prestarse a otras exhibiciones.
Un presente y un futuro
Además de los momentos históricos más relevantes, el museo también es una muestra de la naturaleza, de cómo en un territorio tan grande como el mexicano, se encuentran diversos ecosistemas, entre ellos el desierto, bosque y selva.
Desde 2006, el Museo de Historia Mexicana forma parte de “3 Museos”, que además del recinto mencionado, integra al Museo del Palacio, que detalla la historia de Nuevo León en 400 piezas, y al Museo del Noreste, que exhibe una exposición permanente de la historia regional.
