Fuera del lugar de origen, cualquier incidente puede adquirir proporciones no deseadas debido a las múltiples variables que se encuentran fuera del control del viajero, y aunque no todo puede ser perfecto, al planear un viaje se pueden prever detalles que nos evitarán o minimizarán sufrir alguna eventualidad.
Es importante que, al salir de casa, y dependiendo del destino, se incluya un seguro de viaje que puede tener diversas coberturas, una de las prioritarias es la médica, pero también se puede considerar por cancelaciones y retrasos, pérdida de equipaje y pertenencias, así como aquellas para actividades de alto riesgo.
La inversión en el seguro de viaje varía de acuerdo con el tipo de cobertura, la edad, el destino, el tiempo que dure el viaje, la condición de salud previa y el nivel de riesgo, sin embargo, representa una tranquilidad y alivio económico para quien sufre algún percance mientras está fuera de sus actividades cotidianas.
Los interesados pueden acercarse a las instituciones bancarias para conocer las opciones y las ofertas, algunas de ellas se vuelven más atractivas en la temporada alta, también pueden solicitar información a la agencia de viaje, instituciones financiera y compañías de seguro.
Los expertos recomiendan revisar las “letras pequeñas” que se refieren a los casos de excepción y las limitaciones del paquete, así como los términos y condiciones para tener claridad sobre los alcances de la cobertura, también es importante asegurarse que la empresa tenga una sólida reputación y comprar las opciones que hay en el mercado.